Señalética del derrumbe

La condición humana expresa una manera de estar en el mundo viviendo y actuando en él. Se podría decir que la condición humana nos orilla a la búsqueda eterna de un propósito, nos da autonomía para hacer el bien o el mal, como humanos solemos urdir lo que nos da plenitud, felicidad, amor, pero de igual forma éstas acciones tienen posibles que llevan consigo dolor, traición, desilusión, de nosotros mismos y de los demás. 

Sin embargo no podemos dar prejuicios a los actos, seria caer en un camino insondable, nos queda asumirlo como una aglomeración que conforma al humano y que además son medios que satisfacen el avance inexorable del tiempo.

Señalética del derrumbe es una serie que comienza como dibujos que se desbordan por si mismos y se levantan para convertirse en esculturas, utilizando cerámicas, maderas de construcción y textiles que convergen como ensambles yuxtaponiendo anotaciones de tiempo-espacio. 

Las señaléticas son momentos congelados y des focalizados de situaciones al borde del colapso (tragicomedias) de la vida cotidiana, son notas que constituyen una parte de la sociedad. El juego de la imagen y el desuso asumen el absurdo y el recreo.

El material de construcción son vistas como sobrantes de una gloria, lo que alguna vez fue un todo, mientras que el textil son anotaciones de la vida diaria que replantean la percepción y el sentido de lo que asumimos. En conjunto son tropos visuales de la humanidad.